Tras el parto, el bebé de manera instintiva va buscando el olor, el sabor de aquello que ha estado deglutiendo pasado el primer trimestre de gestación.
Si nada se lo impide o le interfiere encontrará el pecho de su madre donde se reencontrará con algo que le volverá a recordar que está seguro, que se encuentra sostenido, protegido.
Una asesoría en lactancia está para contribuir, favorecer, detectar posibles interferencias, para apoyar a la madre, a la pareja en todo aquello que puedan necesitar en la instauración y mantenimiento de lactancia materna.
Los inicios no siempre son fáciles y dejarse acompañar puede hacer que viváis esos momentos de una manera liviana, incluso gozosa mientras os recuperáis y os vais haciendo a las necesidades de vuestro bebé.
Pueden haber recomendaciones, refuerzos o incluso tratamientos que faciliten y os hagan disfrutar de esa lactancia materna y la repercusión que tiene en el día a día de la madre, de la familia cuando se goza.
